Elisa nació en Córdoba, Argentina, donde se graduó en Arquitectura. Sin embargo, cambió su profesión para dedicarse a su pasión, la pastelería. Hace más de una década se mudó a Barcelona, donde, junto con Sebastián, creó Florentine Bake Shop, una de las primeras pastelerías americanas de Barcelona. Heredó el entusiasmo por la cocina de su familia, y lo perfeccionó en la École Lenôtre de París, en la Escuela de Pastelería del Gremio de Barcelona y en el Espai Sucre, también de Barcelona. Hoy, además de su trabajo de pastelera, se dedica a impartir cursos y a colaborar con marcas comerciales confeccionando recetas. En este libro, Elisa combina su pasión por la pastelería con la fotografía, otra de sus aficiones.